Me gusta el sonido
de tu voz susurrando a mi oído. Palabras que, silenciosas, nunca me dijiste sobre
la distancia entre tu mente y la mía.
"Como un salto en el vació de quien no teme a la
muerte, demasiado inmerecido, un silencio como este, objetivo conseguido, no pudo faltar más suerte. Todo un mundo el anclado ha sido, todo un mar para
perderte, todo el tiempo que se ha
ido, todo el tiempo estando ausente"
Porque a veces,
cuando intento recordarte no puedo. Y tengo miedo de que todo esto no sea más
que una falsa realidad creada por mi mente. Tengo miedo de que te desvanezcas,
de que esto, que poco a poco vamos teniendo, vuele por los aires. Quizás por
eso intento ser yo misma, como nunca antes lo he sido. Porque no quiero que sea
un espejo el que se enamore de ti. Quiero ser yo, la que esta deseando que la
mires a los ojos, y la hagas temblar. A la que beses a escondidas en una playa,
viendo la luna, como tantas veces hicimos, pero que esta vez se convierta en
diferente. Porque necesito soñar. Aunque sea un par de horas, con que me
susurras palabras bonitas al oído, y haces que todo sea especial. Rompiendo
nuestra mala suerte. Porque lo admito, necesito que estés aquí, que una parte
de ti se quede conmigo. Que me escuches y me hagas reír. Que me sorprendas con
comentarios que no vienen a cuento pero que me sacan una sonrisa. Que me
preguntes donde he estado escondida todo este tiempo. Necesito sentirte cerca,
muy cerca, tan cerca que te respire, y mi aliento se convierta en el tuyo.
Porque sí, tengo ganas de besarte. De parar el tiempo y el mundo se quede
estático, solos tu y yo. Aunque sea solo unos segundos, pero necesito que me
abraces, que te rías de mis canciones y me susurres que tienes preparadas mil
cosas especiales para mi.